ELON MUSK CONFIRMA LA COMPRA DE TWITTER

A poco menos de 24 horas del plazo que le había otorgado una jueza para cerrar la compra, el magnate confirmaba hoy la transacción.

Ayer, miércoles 26 de octubre, el multimillonario Elon Musk se proclamaba en su perfil de Twitter como "el tuitero jefe", y lo acompañaba con un vídeo en el que entraba en la sede de la red social con un lavabo, que hace referencia a "let that sink in", un meme extendido en la comunidad angloparlante que se puede interpretar como "piensa en ello un segundo" o "asimílalo", con un juego de palabras entre "sink" (lavabo) y esta expresión.

Según él, lo hace "por el futuro de la civilización", "para ayudar a la humanidad a la que amo" y "no para hacer dinero", pues dice que no quiere que las redes sociales sigan el mismo camino que los medios en papel, que dividen a la población según sus opiniones. Quiere que Twitter sea "una plaza digital común donde pueda debatirse de manera sana un amplio espectro de creencias" y no "un infierno gratis para todos, donde puede decirse cualquier cosa sin consecuencias", si no que "se deben respetar las reglas".

Sobre las recientes especulaciones de si se planteaba despedir al 75% de la plantilla de la red social, el propietario de Tesla y SpaceX lo ha negado rotundamente.

La operación, en la que entran en juego 44.000 millones de dólares podría ser cerrada mañana.

Por último,  Musk reconocía que su propósito "no va a ser sencillo", y que "existe el riesgo de fallar", pero aun así se muestra convencido.