Así nos ven, así somos

Un reportaje íntimo sobre cómo somos hoy en día los adolescentes y cómo nos ven los más mayores

Soy una adolescente de 14 años, estudiante de 3º de la ESO en el Colegio Jesús Maestro de León. 

Pertenezco a la que llaman generación de Cristal o generación Z. Muchas personas adultas piensan que somos una generación débil, frágil, inestable e inseguros. Que nuestra generación no tiene la misma educación ni los mismos valores que tienen los adultos. Muchos también piensan que no tenemos respeto a nuestros mayores y que somos unos egoístas porque solo pensamos en nuestras cosas.

También he escuchado muchas veces que somos una generación que no valora nada de lo que tenemos porque lo tenemos todo, no como antes, que los hijos tenían lo que podían.

Que tenemos muchas facilidades y que para nosotros lo primero son nuestros amigos o amigas.

Lo que más he escuchado, es que somos una generación tras una pantalla de móvil, de ordenador, de videojuegos, de Tablet… bueno que ya no sabemos jugar con nuestros amigos en la calle. Así nos ven muchas personas.

Ante todas estas opiniones puedo decir que somos unos niños y niñas normales y corrientes, pero hemos nacido en la era de la tecnología.

Tenemos un gran respeto a nuestros abuelos y padres, de echo nuestros padres son nuestros héroes, y nuestros abuelos son nuestras personas favoritas.

Nos han enseñado a pedir las cosas por favor, a dar siempre la gracias, cuando entramos a algún sitio saludamos con un “hola”, “buenos días…” , y si nos encontramos a una persona mayor en algún sitio público como el autobús le cedemos el asiento, tal y como nos han enseñado en casa.

No somos una generación frágil, no nos rompemos tan fácilmente, pero si lloramos es porque sentimos miedo o simplemente porque en ese momento lo necesitamos sea cual sea el motivo.

Valoramos todo lo que tenemos, y más cuando nuestros abuelos nos cuentan cómo se comunicaban ellos, que se escribían cartas y que llamaban desde un teléfono fijo que había en la plaza del pueblo, teléfono que usaban todos los vecinos. Somos conscientes que tenemos muchas cosas, y también somos conscientes el valor que tienen.

Muchos expertos dicen que somos una generación de cristal porque nuestros padres quieren darnos todo lo que ellos no tuvieron. Pues eso es una gran verdad, porque mis padres siempre me dicen que se esfuerzan para que yo pueda tener un futuro, cosa que ya hicieron mis abuelos, que se esforzaban muchísimo para que sus hijos pudieran estudiar fuera del pueblo y pagar a sus hijos la Universidad y los gastos que ello conllevaba.

Salimos con nuestros amigos y amigas, claro que también puedo decir que los padres tienen miedo que nos pase algo porque dicen que ahora no hay la misma seguridad, pero salimos y mi generación ha salido y jugado en el parque como la que más.

La realidad es que mi generación no se diferencia mucho de las anteriores, somos adolescentes que ahora empezamos a descubrir la diversión de otra manera, ya no hay muñecas ni coches y en los parques no jugamos a la cuerda, ahora nos contamos nuestras cosas, paseamos y hacemos videos con nuestros teléfonos, e incluso muchas veces lo publicamos en alguna red social.

También decir que somos una generación que estudia diariamente y sin hablar de las extraescolares, somos responsables y estudiamos para nuestro futuro. 

No somos egoístas, solo somos adolescentes y ¿cómo erais vosotros a nuestra edad?

Sólo me queda decir que siendo nosotros como somos, nuestros padres no nos han educado nada mal, y SÍ nos quieren dar lo que ellos no tuvieron, porque todos los padres quieren lo mejor para sus hijos.