EL LECANEMAB

Los resultados afirman que el fármaco reduce un 27% el deterioro cognitivo

El Alzheimer es un trastorno cerebral que destruye lentamente la memoria y la capacidad de pensar y, con el tiempo, la habilidad de llevar a cabo las rutinas más sencillas. Esta enfermedad suele afectar a adultos mayores y, hasta hace poco, solo existían medicamentos para retrasar los síntomas más graves, pero en los últimos meses ha aparecido un nuevo fármaco.

Este es el Lecanemab, un anticuerpo monoclonal diseñado para eliminar acumulaciones de proteínas del cerebro que muchos creen que son la principal causa del Alzheimer. Está dando resultados muy positivos en estados precoces. Los resultados de este fármaco han sido confirmados por la revista médica The New England Journal of Medicine y en un congreso internacional, ubicado en San Francisco, centrado en esta enfermedad.

En octubre, se anunció el avance del estudio de este anticuerpo monoclonal, esto produjo grandes aspiraciones de los neurólogos y esperanza de que se publicaran todos los detalles respecto a este estudio para poder confirmar que el Lecanemab sería el primer fármaco en 20 años que ha demostrado algún efecto. Según algunos expertos de este campo, los resultados obtenidos son bastante prometedores, aunque el grado de beneficio sea pequeño.

Aunque no todo son ventajas: durante el ensayo, alrededor del 20% de los partícipes que recibieron lecanemab presentaron en sus diagnósticos cerebrales anomalías de hinchazón o sangrado, aunque los que experimentaron síntomas de estos efectos secundarios fueron menos de un 3%. Sin embargo, esto fue distinto en los ensayos de la fase III de aducanumab, ya que el 40% de sus partícipes mostraron signos de inflamación cerebral.

Por otra parte, se supo que un día antes de la presentación dos de los pacientes de este ensayo murieron por hemorragias cerebrales. Estas muertes están produciendo incertidumbre sobre su seguridad en ciertos pacientes, por eso se están estudiando para saber si su causa es el consumo de lecanemab.

La mujer sufrió un derrame cerebral y fue tratada con un anticoagulante que inmediatamente provocó la hemorragia. La paciente también tenía una enfermedad en la que se sustituye el músculo liso de las paredes de los vasos sanguíneos por depósitos de amiloide.

El lecanemab se dirige al amiloide y se cree que su uso debilitó los vasos sanguíneos de la mujer dando lugar a la hemorragia.