La fábrica de azúcar en el barrio de La Sal de León, un tesoro escondido en la ciudad

Aunque parezca contradictorio hubo una época en León en que esto era el día a día de la ciudad. Hace ya más de 30 años que la azucarera de Santa Elvira dejó de endulzar la vida de muchas personas.

Una mesa redonda en torno al libro "Azucarera Santa Elvira". Crónica de una gran industria leonesa escrito por la leonesa Cony Salomón puso ayer en relieve la importancia de esta fábrica en la historia de León. Este acto tuvo lugar a las 20:00 horas en la Fundación Sierra Pambley.

Este libro acerca a los lectores a una de esas realidades ya desaparecidas que pueblan la historia reciente de León.

Como testigo directo de la comunidad de trabajadores de la Azucarera Santa Elvira, Cony, hija y nieta de empleados de esta industria leonesa, revive la importancia social que para la ciudad tuvieron este tipo de iniciativas. No es un libro de historia, afirma la autora, sino que es más cercano a una crónica que explora el abandono y el olvido.

Una parte de la historia de León, y de su industria, permanece pegada a las paredes apuntaladas de la vieja Azucarera de Santa Elvira.

Esta publicación pretende ser testimonio de la trascendencia que esta empresa tuvo en León durante sus cincuenta y seis años de actividad, tanto en el ámbito industrial como en el social, sin olvidar el humano, ya que, de un modo u otro, influyó en las vivencias emocionales de las personas que formaron parte de ella.

Actualmente parte de los terrenos de la antigua azucarera se han convertido en el Palacio de Exposiciones y Congresos de la ciudad de León.

Sirva esta introducción cultural para acercarnos al tema que queremos tratar “el cultivo de la remolacha”

La remolacha azucarera (Beta vulgaris var. saccharífera), pertenece a la familia de las Quenopodiáceas. Su polinización es cruzada, producida normalmente por viento.

Es una planta de ciclo bianual. En el año de siembra forma un abundante aparato foliar y acumula sacarosa en la raíz principal, mientras que en el segundo año, tras la vernalización, emite las flores y fructifica. Por tanto, para la producción de azúcar interesa sólo la fase vegetativa (primer año), siendo lo adecuado recolectar cuando tiene lugar el máximo de acumulación de sacarosa en la raíz. La fase reproductiva (segundo año) sólo interesa para la producción de semillas.

En España se distinguen dos zonas diferenciadas por el momento de su siembra y de su cosecha.

La zona de siembra primaveral se corresponde con aquella practicada entre los meses de febrero y mayo y cuya cosecha se efectúa entre los meses de octubre y abril. La mayor parte de esta superficie se encuentra localizada en las comunidades autónomas de Castilla y León, País Vasco, La Rioja, Navarra y Aragón, y la práctica totalidad se realiza bajo sistema de regadío. El total de esta superficie representa aproximadamente el 75% de la superficie total de remolacha azucarera en España.

La zona de siembra otoñal se corresponde con aquella practicada entre los meses de octubre y enero y cuya cosecha se efectúa durante el periodo estival. La mayor parte de esta superficie se encuentra localizada en la comunidad autónoma de Andalucía (principalmente en las provincias de Sevilla y Cádiz). Aunque la mayor parte de la superficie se encuentra en régimen de regadío, existe cierta superficie cultivada en régimen de secano, modalidad que en las últimas campañas ha llegado a situarse en torno al 25-30% del total de la superficie de siembra otoñal. El total de la superficie de siembra otoñal representa aproximadamente el 25% de la superficie total de remolacha azucarera en España.

En próximos reportajes analizaremos nuevos temas en torno a la remolacha azucarera.