Massa pone contra las cuerdas a Milei en su último debate antes de la segunda vuelta

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El candidato a la presidencia en Argentina, Javier Milei no ha conseguido adaptarse al ritmo de su "contrincante" Sergio Massa quién ha dictado el ritmo en este debate.

Desde la primera vuelta de las elecciones generales en Argentina, y del fracaso para nada esperado de Milei en las mismas la tensión en Argentina no ha parado de aumentar por quién llevará el mando del país durante la próxima legislatura, y para decidirlo se realizará la segunda vuelta de las elecciones, la cual se celebrará el 19 de noviembre. Pero antes de las elecciones se ha de realizar un debate con el fin de mantener a los votantes actuales e incluso conseguir algunos nuevos razonando el por qué deberían votarle, pese a esto tampoco se puede confiar del todo en lo que se diga en los debates, pues los políticos pueden mentir descaradamente y aunque posteriormente los medios de comunicación lo desmientan, una gran mayoría no se enterará y el político saldrá ganando.

La gente estaba dividida en dos bandos, el de Massa y el de Milei, siendo este último el cual tenía la mayor confianza depositada debido a su ideología y optimismo compartido con sus votantes. Sin embargo Milei no consiguió llevar bien el debate, mientras que Massa supo llevar el ritmo y controlar en todo momento lo que ocurría.

La actitud de Milei:

Durante el debate, Javier Milei dio la sensación de estar nervioso e impaciente, y esto se puede ver por como cuando Milei había agotado su tiempo en un apartado del debate, a Massa le quedaba aun la mitad del tiempo lo que le dió mucha ventaja, pues este podía decir cualquier cosa y Milei no dispondría de tiempo siquiera para rebatirlas. Además, la actitud de Milei era mucho más seria a la hora de hablar, lo cuál le podría llegar a resultarle perjudicial pues no conseguiría conectar con el espectador facilmente a menos que este simpatizase mucho con los ideales de Milei.

La actitud de Massa: 

Al contrario que Milei, Massa tuvo una actitud en la que predominaba la tranquilidad, dando una mejor sensación el la que su tono apacible era su mejor arma. Este logró permanecerse impasible ante cualquier provocatoria de Milei dando una mejor sensación en el público y logrando conectar con el mismo por su ya reconocido tono.

¿El debate lo dictamina todo?

Si bien es cierto que el debate puede tener una influencia a la hora de las elecciones (ya sea positiva o negativa), lo cierto es que no puede representar un gran cambio en los resultados porque a la gente, aunque se esté en lo cierto o no, no se le puede hacer cambiar de opinión así como así, por lo que a menos de que se dé una desastrosa imagen (como en el caso de Richard Nixon, el cuál convenció a miles de republicanos de cambiar su voto al en aquel entonces joven John Fitzjerald Kennedy, que por la intensa luz que los focos irradiaban en el rostro de Nixon durante la noche del debate, consiguió dar una terrible sensación de nerviosismo al público).

Conclusión:

No debemos estar tan preocupados por la imagen que cada político dé como por la idea que ellos representan, y debemos de pensar en si el modelo político que ofrece cada uno es más acorde al que compartimos, pese a esto la figura que ostenta el cargo de presidente sigue teniendo su relevancia, pero no se puede llegar a afirmar que sea lo más importante.