TÚ PRÓXIMO DESTINO NAVIDEÑO: LAPONIA, FINLANDIA.

Observar las lucecitas del norte, dar un paseo por un trino y explorar las tradiciones sami son los extensos alicientes de esta escapada por el lugar más al norte de Finlandia y uno de los del planeta. (Según la revista digital National Geographic, Javier Martinez Mansilla).

Laponia es el destino navideño ideal para todos los públicos, y es tan famoso entre las personas debido a su mágico concepto de la navidad, la nieve, el frío invernal, los renos, la casa de papá noel, trineos, entre otros, vamos, una fantasía total para todos los niños y los no tan niños. Desde el mes de agosto hasta abril dirigen al turista que se introduce en este confín de páramos que es la meseta de montañas sedosas y bosque de pinos que se adivinan bajo un manto claro que todo lo tapa ahora. El zorro mítico y las auroras boreales son mitos de los sami, el pueblo indigente que conserva el recuerdo y las vistas de Laponia, el lugar más norteño de Europa desde Noruega y Suecia hasta Rusia y Finlandia.

La tranquilidad en medio de un arrecife congelado, la escucha esponjosa de la caída de la nieve y el aullido del raza de perro husky que se muere por arrastrar el trineo o el pitido del viento del Ártico que nos evoca que no estamos nada cerca del sur y del mediterraneo Europeo. Y además que en este lugar hace frío, con temperaturas extendiéndose incluso hasta los cincuenta grados bajo cero. Los habitantes de laponia escogen expresarse de “personas mal equipadas”. Corresponde darles la palabra.

El tiempo invernal nos demuestra el lado más silvestre y a la vez el más cariñoso de toda la Laponia finlandesa, un territorio de 100,367 kilómetros cuadrados ubicado encima de la línea del Círculo Polar Ártico. En estos tiempos, los días se desvanecen y las noches lejos de quitarse, se pigmentan de blanco. Hasta setenta y cinco cm de nieve se almacenan encima de los campos, en el lugar que el reno asháninka sus anchas, diferentes a los trescientos sesenta y cuatro jornadas al año de los mandatos de Santa Claus, del cual morada se sitúa de igual modo por esa amplitud. Sin embargo, más lejos del Napapiiri, la forma que los finlandeses llaman el trazo del Círculo Polar (66º 33’ 49” N), donde la Navidad se habita de forma distinta.

La puerta de Jittlä es uno de los concejos y entradas más largas de la Laponia finlandesa. Con tan solo seis mil residentes y un terreno de ocho mil doscientos sesenta y tres kilómetros cuadrados, se manifiesta como un lugar prístino donde las saturaciones no se encuentran ni en la época más concurrida del año (la Navidad). Igualmente, en épocas frías el aeropuerto Kittlä acoge vuelos cotidianos desde España que acuden numerosos viajeros que van en familia en busca de los paisajes de la película de caricaturas “Frozen” y otras muchas más navideñas y de la zona.

Sabiendo todo esto, no te puede faltar hacer una parada en navidad y visitar Laponia.