La historia de un carril bici: un reportaje sobre movilidad sostenible

Salamanca está cambiando, y uno de sus aspectos más visibles es la aparición del carril bici. Hoy, analizamos la creciente demanda que está teniendo este medio de transporte sostenible en nuestra sociedad.
11.12.2024 - Julio Vivas
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Hasta 2015, la situación de las vías para bicicletas era discontinua, sin seguir ninguna red ciclista. Ese mismo año, se planearon nuevas vías de bici alrededor del centro histórico y en el área metropolitana de Salamanca, también conocido como el alfoz charro. A pesar de este primer planteamiento, tardaron largos años hasta que se finalizaron todos los proyectos. La vía que conectaba Villamayor (pueblo) con Salamanca no vería el inicio de su obra hasta bien entrado el 2023. El mismo proyecto fue anunciado cinco veces, y no se llevó a cabo hasta que llegaron los fondos de la Unión Europea.
Sin duda, los últimos años han sido los más prósperos para la construcción de estas vías. En 2022, 2023 y 2024 se llevaron a cabo el mayor número de proyectos, como la conexión entre el fluvial y el Puente de Felipe VI, que pasa por la Fundación Rodríguez Fabrés. En este proyecto se destinaron 222.602,45€, financiados con los Fondos Europeos ‘Next Generation’.
Actualmente, son más de 120 kilómetros de carril bici que tiene Salamanca, permitiendo un desplazamiento en bici por la ciudad seguro y eficiente. A pesar de ello, no deberíamos conformarnos, todavía queda mucho por hacer para conseguir que la bici sea un transporte más en el entorno urbano.
Otro aspecto fundamental para los ciclistas, es el aparcamiento seguro para bicis. Algunas empresas y establecimientos disponen de ellos en sus tiendas, como es el caso del Decathlon y la estación de trenes. Pero es espacios públicos, aparte de la escasez de estos, carecen de seguridad, lo que afecta el uso de la bici en la ciudad.
Según el Barómetro de la bicicleta en España el número de ciclistas ha aumentado considerablemente, de los 8,1 millones en 2019 hasta los 11 millones en 2022. Esto evidencia la creciente tendencia por este medio de transporte sostenible. A pesar de ello, cabe mencionar que gran parte de estos números representan a un parte de la población que usa la bicicleta con fines meramente deportivos, y no como medio de transporte.
Poco a poco, son más las ciudades que cuentan con redes de bici por toda la ciudad, y cuyos habitantes no dependen de otros transportes para sus desplazamientos. Los países del norte y nórdicos son un gran ejemplo de ello. Copenhague es una de las urbes referentes en este ámbito, cuenta con 1500 kilómetros de carriles que conectan toda la ciudad. Según un estudio realizado por la universidad de la capital danesa, muestra que cada kilómetro de carril bici en Copenhague supone un ahorro de 450.000€ al año por atropellos evitados y salud.
Sin duda la bici tiene consecuencias fundamentales en nuestro entorno y en la sociedad, pero tampoco tendríamos que darle menos importancia a los beneficios que tiene para nuestra salud, como el aumento de la resistencia cardiovascular, la mejora en el sistema inmunológico y la reducción del estrés y la ansiedad entre otras.
comentarios
Rufi | 14-12-2024 16:46
Muy interesante, pero creo que hay mejores cosas en las cuales invertir el dinero de nuestros impuestos. Siempre se recurre al mismo cliché, que es compararnos con otros países europeos, cuando no tiene nada que ver.
MPJ | 11-12-2024 23:41
La reducción de aparcamientos y el aumento de precios nos deja como alternativas el autobús, la bici o ir a pie.
Marta | 11-12-2024 23:20
Desde luego hay que seguir potenciando el carril bici, son todo ventajas. Gracias por informarnos